
AUSTIN, Texas, EE.UU.- Este miércoles se cumple un año en el que un hombre armado matara a 19 niños y dos docentes dentro de un salón de cuarto grado en la escuela primaria Robb de Uvalde, a la fecha aún sigue en curso una investigación penal en Texas sobre la actuación vacilante de la policía ante el tiroteo escolar.
La investigación también analiza cómo las propias autoridades empañaron los días posteriores al ataque, al dar versiones inexactas y contradictorias sobre los esfuerzos realizados para detener al atacante, un adulto joven, armado con un rifle estilo AR.
La investigación va en paralelo a una nueva ola de ira pública en Estados Unidos por la violencia con armas de fuego, llamados renovados en favor de normas más estrictas que regulen esas armas y demandas contra las autoridades en Uvalde, que continúan ocultando registros públicos relacionados con el tiroteo y la respuesta policial.
A pesar de las promesas de los funcionarios de investigaciones exhaustivas y rendición de cuentas, todavía hay mucho que no sabemos.
Las entrevistas con los sobrevivientes, los informes preliminares y los videos de vigilancia difundidos en las redes sociales han revelado el horror que se desarrolló en la escuela.
Pero muchos padres todavía saben poco acerca de cómo fueron los últimos momentos de sus hijos y si sus seres queridos podrían haberse salvado durante los más de 70 minutos de inacción policial.
“Si podemos encontrar los errores que cometimos, tal vez podamos evitar que le suceda a otra comunidad”, dijo recientemente el alcalde de Uvalde, Don McLaughlin, dijo a CNN en una entrevista.
Ha estado pidiendo a los investigadores estatales que publiquen los registros relacionados con el ataque. “No podemos comenzar a sanar y cerrar hasta que obtengamos respuestas”.
La escuela fue cerrada tras lo sucedido. Hoy la rodea una malla, cubierta con un plástico negro, a la espera de ser demolida. En los próximos meses, cuentan las autoridades locales, desaparecerá y quedará todavía menos de aquel suceso que cambió a muchos pero no cambió nada.
El responsable del tiroteo Salvador Ramos, fue abatido por la policía en el acto.